Voy a ser muy clara. Yo creo firmemente que los recursos de Venezuela les pertenecen a TODOS los Venezolanos y que TODOS los Venezolanos deberían beneficiarse equitativamente de nuestra privilegiada posición como guardianes de las más grandes reservas de petróleo y demás recursos naturales del mundo. Creo que deberíamos buscar imitar a naciones como Noruega, la cual se encuentra en unas de las posiciones máximas de transparencia a nivel mundial. Podríamos compartir nuestras riquezas naturales bajo un esquema de organizada y transparente repartición de esas riquezas. La responsabilidad de cualquier gobierno, es la de MANEJAR Y ADMINISTRAR justamente los recursos de la nación, no expropiarlas para el uso personal de aquellos que buscan beneficiarse de ello.
Permítanme también aclararles que pienso que la música y el arte deben de ser el corazón latiente de toda sociedad, y que nuestra salud artística debe de ser un importante barómetro de nuestro compás moral en una sociedad civilizada. Soy una gran luchadora porque el arte y la música le llegue a TODOS los niños, y a todos los seres que compartimos este pequeño hábitat que es el mundo. En ese sentido, El Sistema ha logrado esta gran meta, y aplaudo este aspecto del proyecto así como lo hace el resto de el mundo. Aplaudo a los muchachos, profesores, padres y madres por su esfuerzo y dedicación.
Pero ha llegado el momento en el que los artistas que gozan de prominentes posiciones y voz pública, ya no pueden calladamente aceptar el hurto y destrucción de nuestro país debido a una corrupta ideología política, por miedo a renunciar a beneficios y apoyos económicos. Nuestra democracia ha colapsado, y con ella, nuestra dignidad. Las tres ramas independientes de nuestra democracia han sido usurpadas por un gobierno mal gerenciado, manipulador y gravemente corrupto presentándose como una supuesta democracia. Al menos que exijamos restaurar la dignidad humana en Venezuela, y no solo tocando la música que todos amamos, pronto no tendremos un país en el cual tocar nuestra música y criar a nuestros hijos.
Gustavo: Tienes razón en enfocar tu energía creativa en esa bella flor de música y juventud, y nadie puede negar que has aportado alegría y vitalidad a la música clásica a nivel nacional e internacional. Yo soy la primera en felicitarte por ello, pero te equivocas en ignorar el oasis tóxico en el cual se encuentra esa solitaria flor, a punto de morir y de asfixiarse, consumida por la putrefacción que la rodea. Cuando viajas al extranjero, eres testigo de lo que realmente es una sociedad funcional , lo que es la verdadera ley, y la dignidad humana. ¿Hasta cuándo seguirás ciego a la lamentable realidad de tu país? ¿Hasta cuándo rehusarás ver que somos el antítesis de una sociedad en paz, justa y para todos?
José Antonio: Me conoces desde niña. Dirigiste mi primer concierto con orquesta cuando solo contaba con 8 años. No crecí ni me formé en de El Sistema, pero disfruté infinidad de veces de tocar con tus orquestas. Tú sabes que lo que yo deseo, es lo que tú, Gustavo y todos los músicos Venezolanos quieren- lo que TODOS los Venezolanos queremos- una nación civilizada fundada en los nobles principios de la Regla de Oro. Respeto mutuo, trabajo honesto y justicia para todos sin distinción social de ningún tipo. Una nación que celebre esa relación tan íntegra y profunda que existe entre la música y los Venezolanos. Reitero, estamos luchando por lo mismo, pero de diferentes maneras.
El 12 de Febrero se cruzo una línea. Como bien sabes, una protesta pacífica fue teñida de sangre y muerte por los mismos cuerpos delictivos que han matado a tantos en estos años, aupados y arropados por el gobierno -el gobierno que apoya tus orquestas. El mismo gobierno que gozaba de la participación de tus orquestas, dirigidas por Gustavo y Christian cuando masacraban a nuestros estudiantes en las calles. Había resistido enfrentarme a ti y a Gustavo públicamente hasta ahora. Pero ya la indignación y dolor es demasiado grande. Ahora lo hago debido a la urgencia por la cual vive nuestro país, y les pido APASIONADAMENTE a ustedes y a todos los artistas y colegas que se unan a mi y millones de Venezolanos en exigir la restauración de nuestra dignidad. Una nación no le pertenece a ningún individuo o partido político. Venezuela le pertenece a los Venezolanos!! Ha llegado el momento de devolverle el país a su gente, en unidad, paz y respeto. Ustedes dos tienen el poder de liderar un ENORME y SIGINIFICANTE cambio alzando sus voces y defendiéndonos a TODOS, no solo a las personas beneficiadas e involucradas en EL SISTEMA.
¡POR FAVOR UTILIZEN LA VOZ QUE TIENEN!
Gabriela Montero
El Universal
Caracas 14 de febrerode 2014
Fuente: El Universal